Ciudad de México, 27 de abril (SinEmbargo).- Investigadoras en temas de nutrición y estudiantes de la Universidad Iberoamericana realizaron el manual Exploradores de la Comida, en el que apuestan por la recuperación de las recetas tradicionales mexicanas y evitar que la “globalización” y “medicalización” de los alimentos.
“Queremos proponer la libertad de elegir lo que se quiere y lo que no se quiere con respecto a nuestra alimentación. Los usuarios tienen control de sus hábitos”, dijo en un comunicado de la institución, la doctora Ericka Escalante, académica del Departamento de Salud y coordinadora del proyecto.
Añadió que las dietas restrictivas suponen un menor índice de adherencia.
En dicho libro-guía funge como una propuesta innovadora para promover la sana alimentación entre la población mexicana, y promover que ellos mismos hagan una reflexión sobre si lo que eligen comer es sano o favorece la obesidad.
El proyecto nació como una herramienta para el desarrollo de talleres comunitarios, fundamentados en la educación popular, cuyo objetivo se centra en promover la re-significación de la comida a nivel social y cultural.
Las estrategias contenidas en el manual son viables para aplicarse en diversos contextos y con poblaciones tanto infantiles como adultas, especifican en el comunicado.
Fueron los estudiantes de la licenciatura en Nutrición y Ciencia de los Alimentos quienes realizaron un diagnóstico de la alimentación en México, a partir del cual realizaron el libro.
Uno de sus hallazgos fue que no sólo el entorno determina la presencia de obesidad en los niños y jóvenes de la comunidad, sino que también existe una correlación entre problemas emocionales y sobrepeso en la población infantil.
El texto está dividido en cuatro módulos que abordan desde recetas de cocina tradicionales y saludables, hasta las implicaciones sociales, antropológicas y psicoemocionales de la cocina, y propone actividades lúdicas, así como actos de reflexión y toma de conciencia, con la finalidad de que los participantes se responsabilicen de sus elecciones en comida y hábitos.
“Hay una gran medicalización de la nutrición: yo te digo lo que tienes que hacer, y lo tienes que cumplir. Como una receta, y no una elección. Esto puede resultar contraproducente”, dijo Escalante, quien recalcó la importancia de la reflexión del individuo y el autoconocimiento si se quieren lograr metas referentes a la salud.
Precisó que el manual apunta al rescate de las tradiciones culinarias de la alimentación y al fortalecimiento del consumo de los alimentos endémicos.
“A partir del juego, la vivencia y la participación queremos crear conciencia. Todo mundo ya sabe qué comer y qué no comer, la importancia de no saltarse las comidas y hacer ejercicio. Sin embargo, no hemos sabido cómo dar el ‘salto’ entre el saber y el hacer”, continuó.
“Se trata, un poco, de ir contra la globalización de la comida”, finalizó la experta.